Un grupo bipartidista de senadores y diputados moderados presentó un proyecto de ley esta semana que, según ellos, cambia el enfoque del debate sobre cómo enfrentar el tráfico de fentanilo ilícito de la confrontación y acciones bélicas unilaterales a una que gira en torno de la cooperación militar entre México y Estados Unidos.
Al mismo tiempo, gobernadores republicanos expresaron apoyo al espectáculo político de su colega en Texas de desplegar fuerzas estatales para “asegurar” la frontera y frenar el ingreso de inmigrantes y drogas ilícitas ante el “fracaso” del gobierno demócrata de Joe Biden.
En Washington, al presentar otra iniciativa de ley más dedicada al fentanilo, la senadora republicana Jodi Ernst, copatrocinadora junto con su colega demócrata Tim Kaine, declaró que “este trabajo bilateral abarcará a México como un socio activo para enfrentar el tráfico de fentanilo y poner las herramientas del Pentágono en uso para salvar vidas estadunidenses”.
La iniciativa de ley fue introducida apenas esta semana y aún no se ha programado una audiencia sobre la medida, pero una versión idéntica fue presentada en la cámara baja por el demócrata Salud Carbajal y la republicana Stephanie Bice para que procedan ambas de manera paralela.
El proyecto de ley designa al tráfico de fentanilo como una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos proveniente de los cárteles de la droga en México, instruye al Pentágono para desarrollar una estrategia para confrontar el tráfico de fentanilo en “cooperación” con las fuerzas armadas de México, entre otras medidas.
El proyecto bipartidista y bicameral busca ser una alternativa a otras propuestas legislativas que tratan de autorizar el uso unilateral de fuerza militar para atacar a los cárteles de droga en territorio mexicano. “Esto es una rampa de salida por la tontería de la autorización de uso de fuerza militar”, comentó un asesor legislativo republicano al boletín National Security Daily de Politico.
LA FRONTERA Y LOS REPUBLICANOS
Mientras tanto, la frontera con México sigue siendo oro político para los republicanos. Esta semana 24 gobernadores republicanos declararon su “apoyo” al gobernador de Texas, Greg Abbott, para “asegurar la frontera”. En una carta conjunta, en respuesta a la solicitud dramática de Abbott pidiendo el apoyo de sus colegas, afirmaron que “mientras que gobierno federal ha abdicado sus deberes, los gobernadores republicanos están listos para proteger la frontera Estados Unidos-México y mantener a las familias seguras”.
Utilizando el tema y efectos del fentanilo para justificar su maniobra política, los 24 gobernadores subrayan que “todos los estados han sufrido los efectos de drogas legales e ilegales que cruzan la frontera y todo estado es un estado fronterizo dado el influjo devastador de drogas en nuestras comunidades”. Y continuando con la falacia de que los inmigrantes transportan drogas, afirman que apoyan los esfuerzos de su colega texano incluyendo el despliegue de una fuerza “tácita” a la frontera para evitar “cruces ilegales y mantener segura la frontera”