Ante un entorno de constante cambio y que, sin duda, implicará desafíos importantes para la humanidad, el futurista Anton Musgrave, cofundador de FutureWorld International, de caonsejos sobre cómo lidiar con la tecnología y la Inteligencia Artificial.
“En un futuro, gran parte de la tecnología y la inteligencia artificial (IA) sustituirá la labor humana. Es tanto aterrador como emocionante, cuando pensamos en la liberación de inteligencia humana para otros ámbitos”, opina.
En ese sentido, estima, la tecnología “va a ayudar a convertirnos en mejores humanos, porque va a permitirnos tener más tiempo para desarrollar virtudes como la empatía, la colaboración, etc”.
En una conferencia especial durante la Reunión Nacional de Profesores 2023 del Tec de Monterrey, Musgrave invitó a los docentes a tener apertura y curiosidad para adaptar la tecnología a la nueva educación.
“El sistema de ‘ser humano’ necesita un reseteo, la manera en la que operamos nuestras organizaciones también requiere un reinicio y eso aplica también para el ámbito educativo”.
¿EN QUÉ CONTEXTO SE INSERTA LA TECNOLOGÍA EN NUESTRAS VIDAS?
De acuerdo con la reflexión de Musgrave, puede ser un desacierto intentar abordar el tema de la tecnología, preguntándose cuestiones como el impacto de la inteligencia artificial en la educación.
Por el contrario, el futurista prefiere partir desde un cuestionamiento que explore el panorama presente y futuro en el cual la tecnología se está integrando.
“Cuando veo el futuro, veo algunos retos muy significativos que nosotros como raza humana estamos enfrentando. Una de las grandes incógnitas es: ¿cómo educamos a 8.5 mil millones de personas?
“Y considerando que en los siguientes 10 años vamos a experimentar más cambios que en los últimos 100, ¿cómo enseñamos a los humanos a ser más resilientes y aceptar dichos retos?”, añade.
Según explica el empresario, para 2030 nos vemos cara a cara con un panorama en el que la inteligencia artificial es parte de cada aula e institución, entendiendo completamente sus estrategias, presupuestos, retos, competidores, decisiones, etc.
En dicha situación, Musgrave indica la importancia de preguntarse sobre el valor personal que tiene cada uno y la aportación que hacemos como seres humanos en este nuevo paradigma.
“Hay que recordar que la tecnología no es un sustituto. Al contrario, nos va a ayudar a convertirnos en mejores humanos, porque va a permitirnos tener más tiempo para desarrollar virtudes como la empatía, la colaboración, etc.”, agrega.
“Hay que recordar que la tecnología no es un sustituto. Al contrario, nos va a ayudar a convertirnos en mejores humanos”.
DEJAR IR EL PENSAMIENTO ANTICUADO ES EL PRIMER PASO PARA ADAPTARSE
Para llevar a cabo una transición exitosa hacia el futuro educativo que, según recalca Anton, inevitablemente contará con las tecnologías integradas completamente en el salón de clase, es necesario cambiar nuestra forma de pensar.
“Estamos haciendo la transición a un nuevo mundo que para muchos de nosotros es intimidante, aunque los jóvenes parecen estar entusiasmados por el mismo, eso me da muchísima esperanza”, comparte el orador.
“Nuestro éxito es proporcional a la cantidad de legado del mundo viejo al nuevo que traemos, porque el legado crea fricción”, explica.
Siendo así, en entrevista con el panelista, este explicó que para él, la antítesis ante el legado de las viejas instituciones, prácticas y, en general, a la resistencia al cambio, es la fluidez y la adaptabilidad.
Musgrave explica que la “fortaleza” del pensamiento de legado se basa en la “tradición”, y el justificar comportamientos o incluso estructuras obsoletas debido a que estas llevan un largo periodo de haber sido implementadas.
“Un ejemplo de esto se ve en el salón de clases, donde los alumnos están sentados en bancas individuales acomodadas en un patrón lineal, no necesariamente porque sea la mejor forma de aprender, sino porque eso se ha hecho desde hace 300 años”, explica en entrevista a CONECTA.
“Igual que cualquier emprendedor, también es importante adelantarse a los eventos, ver qué necesidades hay con los estudiantes y en el entorno en el que vivimos”, agrega.
CURIOSIDAD Y APERTURA, CLAVES PARA NO QUEDAR OBSOLETO
Con una mente fresca, Anton recomienda a los profesores que estén en proceso de incorporar más herramientas tecnológicas a sus clases, mantener su sentido de curiosidad vivo y eviten cerrarse al aprendizaje de todas las fuentes posibles.
“Hablen y pregúntenle a sus estudiantes, a sus propios hijos, sobre cómo interactúan con la tecnología y a partir de sus respuestas hay que plantearse cómo puede funcionar eso en el aula”, explica Musgrave.
“Creo que si diseñas la solución con los estudiantes y desde lo que ellos piensan tendrás más posibilidad de éxito, pues ellos son quienes realmente tienen ese acercamiento a ella en el día a día”, agregó.
Asimismo, el experto advierte a los docentes sobre algunos posibles retos a los que se pueden enfrentar en este proceso, como la cuestión de privacidad o incluso el grado de entendimiento que se tiene ante ciertas tecnologías.
Claro está, que de manera realista indica el futurista, no es posible eliminar dichos riesgos, por lo que es mejor opción estar informados de los mismos y educar a los estudiantes para que cuenten con las herramientas para enfrentarse a ellos.
Finalmente, el orador recomienda fuertemente a que los profesores se abran a nuevas experiencias en cada oportunidad que tengan, ya que esto les ayudará a replantear las preguntas y la información que tienen en el aula.
“La tecnología no tiene curiosidad, no cuenta con un sentido de ambición para aprender más, para querer saber más y eso es algo que siempre nos va a diferenciar. Los profesores y los alumnos pueden soñar, los profesores pueden ayudar a sus alumnos a soñar”, concluye.
LA REUNIÓN NACIONAL DE PROFESORAS Y PROFESORES TEC
En el marco del 80 aniversario del Tecnológico de Monterrey, se lleva a cabo la décima edición de la Reunión Nacional de Profesoras y Profesores (RNP), una jornada donde profesoras y profesores coinciden para seguir aprendiendo, creciendo y conectando.
Juan Pablo Murra, rector de Profesional y Posgrado del Tec, invitó a las y los profesores a ver la RNP como una oportunidad de encuentro, conexión y colaboración para retomar conversaciones con colegas y hacer nuevas conexiones.
“El marco del 80 aniversario era una condición importante para poder reunirnos; juntos, sigamos construyendo una gran facultad, un gran Tecnológico de Monterrey y avancemos en el impacto que vamos a tener”, expresó el directivo.
La RNP 2023 tiene una duración de 3 días, con sede en el campus Monterrey.
Durante esta jornada se llevan a cabo presentaciones institucionales, la ceremonia del Premio a las y los Profesores Inspiradores, reuniones académicas, conferencias y espacios de convivencia.
Participan conferencias de especialistas como Peter Felten, director ejecutivo del Center for Engaged Learning; Zaida Muxí, profesora distinguida de Arquitectura; Tony Silard, profesor invitado distinguido de Liderazgo; y el futurista Anton Musgrave, entre otros.