Equipos de rescate buscaban este martes sobrevivientes entre el barro de un alud de tierra que dejó hasta el momento 14 muertos y más de una decena de desaparecidos en la carretera que conecta Bogotá con el sureste de Colombia, a la altura del municipio de Quetame, en el departamento de Cundinamarca.
“Ya son 14 los cuerpos hallados sin vida y seis las personas halladas con vida y remitidas a puestos de salud y hospitales”, dijo en un video de Twitter Nicolás García, gobernador del departamento de Cundinamarca, donde ocurrió la tragedia, provocada por fuertes lluvias.
En un primer balance entregado esta mañana la Defensa civil contó 8 personas muertas, entre ellas un menor.
“No se ha podido cuantificar el número de personas desaparecidas, pero se habla de 11 (…) Estamos tratando de identificar a las personas que habitaban” en 20 viviendas arrasadas por la avalancha de lodo y piedras, dijo a la AFP el coronel Jorge Díaz, director local de la Defensa Civil colombiana.
El gobernador tampoco precisó cuántos pobladores de este pequeño caserío ubicado a orillas de la carretera siguen desaparecidos.
“Debido a las fuertes precipitaciones presentadas en la tarde y la noche de ayer, sobre las 23 horas 15 se presentó una avenida torrencial en la vereda Naranjal”, explicó el cuerpo de Bomberos del departamento de Cundinamarca
El deslizamiento ocurrió cerca a un puesto de peaje ubicado a unos 60 kilómetros de la capital Bogotá y destruyó un puente de la carretera.
Piedras y barro obstruyen a esta hora la vía entre Bogotá y Villavicencio, uno de los principales corredores de carga del país, constató un reportero de la AFP. La carretera, donde esa clase de derrumbes son habituales, permanece cerrada y varios camiones y motocicletas quedaron atrapados en la zona.
DOS METROS DE BARRO
“La muerte que llega a Quetame, Cundinamarca, demuestra la imperiosa necesidad de ordenar el territorio alrededor del agua (…) Mi sentido pésame a las familias víctimas”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente, el izquierdista Gustavo Petro.
Este martes se anunció que el Ejército desplazó a 80 militares a la zona para ayudar en la búsqueda de los desaparecidos.
De su lado, el alcalde de municipio, Camilo Parrado, lamentó que “muchos hogares perdieran dos, tres y hasta cuatro miembros de su familia”.
“Los organismos de socorro están con drones reiniciando la búsqueda. El lodo quedó a casi un metro (de altura) en algunos sectores, en otros a dos metros, eso es muy complejo”, explicó Parrado a la emisora local El Dorado Radio
Los bomberos evacuaron a una cuarentena de sobrevivientes. Seis de ellos fueron llevados con heridas a centros médicos.
Medios locales mostraron monumentales embotellamientos en la salida de Bogotá a Villavicencio, principal ciudad del suroriente colombiano
La temporada de lluvias en Colombia inició en junio y suele extenderse hasta noviembre. El año pasado dejó unos 300 muertos y 700 mil afectados, incluidas 34 personas que murieron cuando el autobús en el que viajaban quedó sepultado bajo un alud en el occidente del país.