La unidad comenzó a llenarse de humo por lo que el conductor se estacionó a un lado de la carretera, dejando salir a los pasajeros junto con sus pertenencias.
Momentos después de que se evacuó el vehículo, las llamas comenzaron a observarse desde la parte trasera; ninguna persona resultó lesionada.
Un camión de Omnibus ayudó a los pasajeros, trasladándolos a la capital mientras que el conductor de ARD permaneció en el lugar, en espera de recibir ayuda con el incendio.