Ginebra. El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, se dijo el martes «horrorizado» por el bombardeo israelí del lunes a proximidad de un hospital al sur de Beirut.
«Estoy horrorizado por el ataque aéreo israelí cerca del hospital Rafic Hariri en el densamente poblado barrio Jnah de Beirut, que habría dejado al menos 18 muertos, entre ellos cuatro niños, y 60 heridos», afirmó Türk en un comunicado de prensa.
«Los principios fundamentales del derecho humanitario internacional sobre la protección de civiles deben respetarse», añadió.
Los rescatistas seguían buscando el martes posibles supervivientes del bombardeo, que podría haber provocado un número mayor de víctimas.
El hospital sólo sufrió daños menores, «en los paneles solares y en las fachadas de cristal», afirmó su director.
Pero cerca de allí, cuatro edificios fueron arrasados por el ataque, constató un corresponsal de AFP.
«Los hospitales, las ambulancias y el personal médico están específicamente protegidos por el derecho internacional humanitario», subrayó Türk.
«Reitero el llamamiento de la ONU a un cese inmediato de las hostilidades y recuerdo a todas las partes que la protección de los civiles debe ser una prioridad máxima», añadió.