García Luna aseguró, además, que le ofrecieron “beneficios económicos” para convertirse en testigo “no para imputar delicuentes-narcotraficantes”, sino que “la perspectiva era imputar personas e instituciones que en el corto plazo debilitaría el desarrollo, paz pública y vida institucional del país. Evidentemente no acepté y la reacción fue explosiva”.
Sin presentar pruebas, las cuales asegura que no puede brindar porque están en las cortes estadunidenses, acusó también al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de estar involucrado con el cofundador del cártel de Sinaloa, Ismael El Mayo Zambada, quien es enjuiciado en los mismos tribunales neoyorkinos, tras ser detenido en Texas.
“Es del conocimiento público y está en los registros oficiales de México y Estados Unidos, los contactos, videos, audios, fotografías, registros de comunicación y gestión entre el actual presidente de México Andrés López Obrador y sus operadores con los líderes de narcotrafico y sus familias”, aseguró en la misiva, que tiene su firma y la fecha del pasado día 13.