Dos operadoras de camiones de personal han sido asesinadas: una en febrero y otra el pasado 12 de julio.
El segundo asesinato contra una mujer conductora de unidades de transporte de personal preocupa a sus compañeras, que laboran para diferentes empresas.
“Yo también soy chofer y tengo miedo porque ya son dos choferes mujeres que asesinan”, dice una amiga de la primera víctima y la cual refiere que cada vez más mujeres optan por este oficio para disponer de más tiempo para el cuidado de sus hijos.
El horario es el principal atractivo que ven las mujeres que toman el volante; para las empleadas de la industria maquiladora que reciben el servicio es más seguro viajar con mujeres conductoras que con hombres, aseguraron a El Diario algunas operadoras entrevistadas.
Elizabeth Gardea Frausto, de 33 años y madre de tres hijos de 5,12 y 15 años de edad, fue privada de la vida el pasado 18 de febrero por los tripulantes de un vehículo que le dispararon y la hirieron en la cabeza.
“Ella no trabajaba durante el sábado y domingo; sus viajes eran en Arecas y Parajes del Sur, por donde ella vivía, y ese sábado 18 de febrero le habló su coordinador para que cubriera un viaje a las 5 de la mañana que iniciaba en la placita de Zaragoza”, narró una compañera de Elizabeth.
Elizabeth tenía cuatro años laborando como chofer de transporte de personal y pertenecía al Grupo Transportes Ayala. Había trabajado como operadora de producción, pero optó por aprender a manejar camiones debido a que la jornada de trabajo era más corta, por lo que tenía la oportunidad de regresar a su casa y llevar y recoger a sus hijos de la escuela, dijeron sus amigas.
“Ella salió de su casa y antes de llegar al punto para recoger a sus primeros pasajeros la mataron”, recordaron. La unidad de la línea Universitaria quedó en el cruce de las calles Ramón Rayón y Durango y dentro de ella la mujer malherida, que fue videograbada por personas desconocidas.
Hasta el momento no hay personas detenidas.
En un acopio de valor para cumplir su última voluntad, la familia de Elizabeth acordó donar sus órganos y dar vida a otras personas.
Sus hermanas y hermanos contactaron al doctor Alejandro López Hernández, coordinador del área de Donación de Órganos y Tejidos del Hospital Regional 66 del Seguro Social, quien pidió autorización a la Fiscalía estatal para extraer del cuerpo de la víctima el hígado, los riñones, además de tejido óseo, fémur, hueso astrágalo y hueso calcáneo.
El segundo caso fue el de Vanessa Ortiz, agredida el pasado 12 de julio en Ciudad Moderna y quien falleció el pasado lunes 24.
Ella conducía el autobús marcado con el número económico 10356, el cual quedó estacionado en el cruce de la avenida De los Aztecas y calle Arteaga y fue localizado a través del GPS que tenía colocado.
Con esta muerte violenta, ya son 84 asesinatos de mujeres los registrados en Juárez durante el presente año, indican las estadísticas oficiales de la Fiscalía General del Estado.