Rojinegros y rojiblancos nos regalaron un partido de goles, intensidad, patadas y emociones
El Estadio Jalisco no dejó de cimbrar gracias al Clásico Tapatío. Atlas y Chivas brindaron un digno espectáculo en el Clásico más añejo del futbol mexicano, que más allá de terminar con un empate de 3-3 representó lo que sus aficionados esperaban presenciar: un juego con orgullo, pasión e intensidad en la cancha.
Este encuentro estuvo lleno de matices desde el arranque. Tanto en las gradas como dentro del campo, cada asistente se encargó de ambientar este encuentro que arrancó con festejo rojiblanco gracias a la aparición de Roberto Alvarado; el ‘Piojo’ hizo abrió el marcador, registrando su segunda anotación en un juego frente a los rojinegros.
Pero ningún equipo estaba dispuesto a ceder. Por momentos, el dominio fue del Rebaño y la prueba está en que su contundencia les llevó a celebrar el segundo tanto de la noche, de la mano de Carlos Cisneros, y aunque la balanza se inclinó a favor de los dirigidos por Veljko Paunović, aún quedaba mucho por delante.
Los Zorros no bajaron su intensidad y su persistencia fue premiada. Antes de irse al descanso, Julián Quiñones hizo vibrar a su afición al recortar la diferencia, pero el encargado de volver a equilibrar el resultado fue Jonathan Herrera, quien se estrenó como goleador en un Clásico Tapatío.
Las emociones estuvieron a tope al terminar la primera mitad y al regreso del descanso no fue la excepción. El capitán del chiverío, Alexis Vega fue el encargado de volver a poner a su equipo por encima del Atlas con un gol al 55’, pero el gusto les duró poco, pues dos minutos después el propio Quiñones volvió a descontar y finiquitó el empate de 3-3.
Si bien los goles fueron los grandes protagonistas del partido, se debe hacer una especial mención a los arqueros de ambos bandos. Tanto Miguel Jiménez como Camilo Vargas tuvieron importantes intervenciones que fueron esenciales para que sus respectivos equipos evitaran más anotaciones en contra.
Con unidades divididas, Atlas y Chivas mantienen la aspiración de continuar escalando peldaños en este cierre de torneo, y en esta ocasión el verdadero ganador fue el espectador.