La Casa Blanca rechazó confirmar o negar si el presidente estadounidense, Joe Biden, está considerando restaurar el arresto de familias migrantes que cruzan la frontera con México de manera irregular, tal y como informaron en las últimas horas medios locales.
En una rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, consideró que la información reportada por los medios son “rumores” y aseguró que todavía no se ha tomado ninguna decisión sobre las políticas que se implementarán una vez que expire el 11 de mayo el llamado “Título 42“.
“No estoy diciendo que vaya a pasar, no estoy diciendo que no vaya a pasar”, se limitó a decir la portavoz.
Biden acabó con la detención de familias migrantes a finales de 2021, solo meses después de llegar a la Casa Blanca; pero, ahora, su Gobierno está supuestamente barajando restaurar esa práctica ante el temor de que lleguen más migrantes y refugiados a la frontera con el fin del “Título 42”.
El “Título 42” permite expulsar a quienes llegan a la frontera sin darles la oportunidad de presentar su caso para pedir asilo.
Biden heredó esa normativa del expresidente Donald Trump (2017-2021) y, mientras intentaba derogarla en las cortes, la expandió para que se aplicara no solo a mexicanos, salvadoreños, hondureños y guatemaltecos sino también a nacionales de Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua.
Legisladores del Partido Demócrata y organizaciones defensoras de los derechos humanos han criticado a Biden por seguir implementando el “Título 42” y argumentan que viola el derecho de cualquier persona a pedir asilo.
La posibilidad de que se restaure la detención de familias migrantes ha provocado nuevas críticas de algunos legisladores demócratas hispanos como Jesús “Chuy” García, de Illinois, y Raúl M. Grijalva, de Arizona, quienes pidieron a Biden que abandone esa idea.
Actualmente, las familias migrantes que cruzan la frontera entre EE.UU. y México de manera irregular no son detenidas, sino que se les permite seguir en libertad y se les pide comparecer ante una corte migratoria que decida sobre su caso.
En ocasiones, a los adultos se les colocan unos brazaletes electrónicos que permiten a las autoridades estadounidenses saber dónde están.
Los expresidentes Barack Obama (2009-2017) y Donald Trump (2017-2021) aplicaron esa política de detención de familias migrantes durante sus años en el poder, aunque una norma judicial establece que los menores solo pueden ser privados de libertad un máximo de 20 días.