En medio de la polémica fase de sentencia contra Patrick Crusius por 90 cargos federales de terrorismo doméstico, en la cual no será condenado a muerte, el fiscal de Distrito de El Paso, Bill Hicks, reiteró que en el caso estatal por asesinato sí se buscará la pena capital.
En conferencia de prensa en la Corte del Condado, Hicks dijo que nada de lo que suceda en la sentencia federal afectará el caso estatal.
“Seguiremos procesando al tirador de Walmart y seguiremos buscando la pena de muerte”, dijo Hicks.
Sin embargo, Hicks dijo que será un jurado de El Paso el que decida si Crusius recibe la pena de muerte.
El fiscal mencionó que cree que Crusius volverá a estar bajo su custodia alrededor de octubre o noviembre.
“Cuando regrese bajo nuestra custodia, irá a juicio y buscaremos la pena de muerte”, comentó Hicks.
Hicks dijo que no sabe cuándo comenzará el juicio y que el juez Medrano fijará una fecha para el juicio.
“Esperamos que sea en algún lugar en 2024 o 2025”, indicó Hicks.
Hicks señaló que ha hablado con numerosos líderes de la ciudad, líderes cívicos y líderes religiosos y revisó la evidencia.
“Siento que no era mi lugar solo para emitir ese juicio. Creo que es apropiado que un jurado de El Paso sea el que decida tomar esa decisión”, dijo Hicks. “Buscamos la pena de muerte y será un jurado de El Paso quien tome la decisión, ya sea que reciba la pena de muerte o cadena perpetua”, añadió.
“La decisión de que un jurado de EP decidiera sobre la pena de muerte fue una decisión muy difícil y requirió mucha oración de mi parte y rechazar a aquellas personas que me instaban fuertemente a retirar la pena de muerte. Pero siento que es apropiado que un jurado tome esa decisión”, dijo Hicks.
Albert Hernández, quien perdió a su hermana Maribel Campos y a su cuñado Leonardo Campos en el tiroteo, no quiso hablar en la Corte Federal durante los testimonios de impacto.
Prefiere hacerlo sólo después de que Crusius se enfrente a un juicio estatal que podría resultar en la pena de muerte, que los fiscales pretenden buscar en los procedimientos estatales.
“Éste es sólo un trampolín para que él sea llevado ante la justicia”, dijo Hernández a Associated Press. “Voy a esperar hasta después del juicio, al final”.
Otros tiroteos masivos en Texas también pesan sobre Hernández, incluida la masacre del año pasado en una escuela primaria en Uvalde que dejó 19 niños y dos maestros muertos.
“No se trata de venganza”, dijo Hernández. “Tiene que ver con el castigo y el castigo apropiado”.