En Estados Unidos, un hombre de 66 años de edad recorrió más de mil 100 kilómetros para asesinar a su hermano y prender fuego a su casa.
Jeffrey Roberts viajó desde Long Beach, California, hasta la casa de su hermano Scott en North Ogden en Utah.
Una cámara de seguridad de la casa de Scott Roberts documentó la llegada de Jeffrey la tarde del 27 de abril.
El hombre tocó el timbre dos veces antes de ser recibido por su cuñada, Jodi Roberts, a quien preguntó si allí se encontraba su madre.
Desde el comedor Scott le indica que su madre no está y es entonces que Jeffrey saca una pistola y dispara a Jodi para posteriormente ir por su hermano, a quien asesinó a tiros.
El agresor salió de la casa pero regresó alrededor de dos minutos después, con varias armas de fuego en mano, para incendiar la propiedad.
Jodi, esposa de Scott, resultó herida de bala, si bien pudo escapar de su casa antes de que las llamas la consumieran.
Vecinos de la pareja agredida llamaron al 911 al escuchar los primeros disparos y a los pocos minutos llegaron al menos dos oficiales, quienes se enfrentaron a disparos con Jeffrey hasta abatirlo.
Kelsey Turner, hija de Scott y Jodi, detalló que su padre y tío se encontraban distanciados, pero no pudo esclarecer el motivo del asesinato.
Mi mamá está viva porque mi papá peleó con mi tío y le dijo a mi mamá que huyera. Saber que mi papá murió como un héroe nos brinda un poco de consuelo”, dijo.
Las autoridades investigan el caso como un asunto familiar y buscan esclarecer cómo fue que Jeffrey adquirió las armas y municiones que utilizó durante el hecho.
En cuanto a Jodi Roberts, fue dada de alta días después.