La fiesta, los excesos, la telerrealidad, los escándalos (incluido su infame video sexual) y el poder que tenía como celebridad en toda la extensión de la palabra cimentaron la fama de Paris Hilton en los primeros años del siglo 21, una época en la que la heredera de la cadena de hoteles fundada por su bisabuelo Conrad Hilton, se comparó con Marilyn Monroe y se autoproclamó “La rubia de la década”. Quien recuerde aquella época convulsa y agitada en la que Paris era la it girl por excelencia tal vez tenga que hacer un esfuerzo para reconocer a la mujer de 42 años que, además de convertirse en empresaria, DJ y filántropa, este año debutó como mamá y, tal como muestran las fotos más recientes de su hijo Phoenix Hilton Reum, se está tomando su papel muy en serio.
Resalta en las fotos, una actitud y un gesto que nunca habíamos visto en Paris Hilton, ya que normalmente es vista en su faceta de DJ, en galas, desfiles de moda o eventos de prensa en los que sus poses (ensayadas y repetidas hasta el cansancio durante al menos los últimos 20 años) la han convertido en un avatar de sí misma. Ahora, sin embargo, la rubia se muestra serena, entregada y con su energía puesta al cuidado de su bebé.
Desde que protagonizó el reality The Simple Life con Nicole Richie y era la sensación durante sus noches de fiesta en Hollywood, en las que los paparazzi capturaron algunas de las mejores escenas del show en que se convirtió su juventud, en medio de arrestos, borracheras, frases épicas, multitud de galanes y célebres amigas como Britney Spears, Lindsay Lohan o Kim Kardashian, hemos sido testigos de la transformación que vivió Paris Hilton como personalidad y como mujer a lo largo de los años.
Desde las veces en que probó suerte como actriz en películas menores como House of wax o The hottie and the nottie, hasta su mejor logrado paso por la música (sus canciones Stars are blind y Screwed son bastante pegajosas y están bien producidas), hubo un cambio radical en cuanto comenzó a triunfar como empresaria con sus líneas de zapatos y perfumes. Además entró en el negocio de la hotelería, un negocio que le viene de herencia familiar, y aunque no es dueña de propiedades, se ha reportado que ha contribuido en el diseño de distintos proyectos basada en la gran experiencia que tiene en el ramo. Y, haciendo honor a su pasado fiestero, ha viajado por el mundo en su rol de DJ animando fiestas en antros de distintos puntos del planeta, incluida la Ciudad de México.
Pero eso no es todo. Distintas comunidades de la Ciudad de México, entre ellas la alcaldía Xochimilco (a la que Paris llama “Jochimilco”) han recibido a la empresaria estadounidense.
Tras el sismo de septiembre de 2017, Paris estuvo presente en la zona para hacer donativos, además de ofrecer más ayuda para la construcción de casas para familias damnificadas, y aunque el proceso fue algo tardado, en 2018 ella misma estuvo en la zona para supervisar el avance del proyecto y realizar nuevos donativos en especia a la comunidad de San Gregorio.
Tras el sismo de septiembre de 2017, Paris estuvo presente en la zona para hacer donativos, además de ofrecer más ayuda para la construcción de casas para familias damnificadas, y aunque el proceso fue algo tardado, en 2018 ella misma estuvo en la zona para supervisar el avance del proyecto y realizar nuevos donativos en especia a la comunidad de San Gregorio.