Honduras y China anunciaron el sábado el establecimiento de relaciones diplomáticas, horas después de que el país centroamericano oficializó la ruptura de las que mantenía con Taiwán desde 1941.
Los ministros de Exteriores de Honduras, Eduardo Reina, y China, Qin Gang, firmaron en Pekín un “Comunicado Conjunto sobre el Establecimiento de Relaciones entre la República Popular China y la República de Honduras” que oficializa los nexos entre las dos naciones.
El paso tiene lugar once días después de que la presidenta hondureña, Xiomara Castro, anunció su intención de establecer lazos con el gigante asiático.
El comunicado indica que la apertura de relaciones es efectiva desde el mismo día de la firma y que los dos países acuerdan “desarrollar relaciones de amistad sobre la base del respeto mutuo a la soberanía y la integridad territorial, la no agresión, la no injerencia en asuntos internos, la igualdad, el beneficio mutuo y la coexistencia pacífica”.
“El Gobierno de Honduras reconoce que en el mundo existe una sola China, que el Gobierno de la República Popular China es el único gobierno que legalmente representa a China y que Taiwán es parte inalienable de su territorio”, prosigue.
Según el texto, Honduras “deberá cortar ‘relaciones diplomáticas’ con Taiwán a partir de este día y se compromete a no desarrollar ningún tipo de relaciones o intercambios oficiales” con la isla.
Tras el acto oficial, el Ministerio chino de Exteriores señaló en un comunicado que “Honduras es un importante país de América Central” y consideró su decisión como “una opción acertada acorde con la tendencia global y apoyada por los pueblos”.
Antes de su investidura como presidenta de Honduras, el 27 de enero de 2022, Xiomara Castro había dicho que no estaba en su agenda abrir relaciones con China.
La decisión hondureña ha estado marcada en los últimos días por la polémica, ya que el canciller taiwanés, Joseph Wu, declaró que el país centroamericano “pidió un alto precio” por mantener los lazos diplomáticos con Taipéi.
Poco después el vicecanciller hondureño, Tony García, confirmaba que su país solicitó a la isla autogobernada 2.000 millones de dólares para reestructurar su deuda externa y, según versiones extraoficiales, también pidió un hospital.
Honduras y Taiwán mantenían una relación de cooperación militar, educativa y económica, y la isla financiaba proyectos de ayuda técnica y agrícola y también acogía a cientos de becarios hondureños en sus universidades.
La ruptura de relaciones con Taiwán por parte de Honduras reduce a 13 el número de países con los que Taipéi mantiene relaciones diplomáticas oficiales y convierte a la nación centroamericana en el noveno país -y quinto latinoamericano- que desde 2016 corta con la isla para establecer lazos con China.
Honduras se sumó a sus vecinos de Panamá, El Salvador, República Dominicana y Nicaragua, que en los últimos años han roto relaciones con la isla en favor de la República Popular China, decisión que mantiene divididos a los hondureños.
Tras ello, el Ministerio de Exteriores de Taiwán lamentó el fin de los “82 años de amistad y cooperación” en su cuenta de Twitter, y aseguró que seguirán “indoblegables” y “trabajando como una fuerza del bien en el mundo”.