Un buque de Médicos Sin Fronteras (MSF) rescató el martes a más de 400 migrantes en el Mediterráneo cerca de la costa de Malta, tras recibir una llamada de socorro, informó la ONG.
El barco de rescate Geo Barents se dirigía a cobijarse del mal tiempo cuando recibió el pedido de auxilio, tuiteó la organización humanitaria.
El Geo Barents llegó a la embarcación en apuros a las 04:00 del martes “después de más de 10 horas de navegación en un mar tormentoso”, dijo MSF.
“Desafortunadamente, el tiempo no permitió a nuestro equipo llevar a cabo el rescate inmediatamente, porque podría poner en peligro las vidas de las personas y del equipo de MSF”, agregó.
No fue hasta primera hora de la tarde que la ONG pudo enviar lanchas rápidas a la embarcación que, según las imágenes tuiteadas por MSF, estaba repleta de personas con chaleco salvavidas en cubierta.
“Después de más de 11 horas de operación, el rescate está terminado y un total de 440 personas, incluyendo 8 mujeres y 30 niños, están ahora a salvo a bordo del Geo Barents y siendo cuidados por el equipo”, dijo.
El buque humanitario fue retenido por las autoridades italianas en febrero por supuestamente vulnerar las reglas para estos rescates impuestas por el nuevo gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni, que llegó al poder en octubre con promesas de reducir la inmigración.
La nueva ley obliga a las ONGs a realizar un solo rescate en cada navegación lo que, según los críticos, incrementa el riesgo de muerte de migrantes en el Mediterráneo Central, la ruta más letal del mundo.
La posición geográfica de Italia la convierte en destino predilecto de los migrantes que zarpan del norte de África en dirección hacia Europa.
Las organizaciones humanitarias solo son responsables de un pequeño porcentaje de los migrantes llevados hasta las costas italianas, porque la mayoría de rescates los realizan los guardacostas o los buques militares.
Pero el gobierno italiano critica que su presencia incentiva y alienta a las redes de tráfico de personas.