La compañía de Elon Musk, SpaceX, presentó ante un tribunal federal del estado de Texas una denuncia en la que solicita que se desestime la demanda del Departamento de Justicia de EE.UU. por supuesta discriminación en sus procesos de contratación.
Así, la empresa respondió a la demanda administrativa presentada por el organismo oficial en agosto, según la cual entre septiembre de 2018 y mayo de 2022, al menos, SpaceX se negó a contratar a solicitantes de asilo y refugiados en razón de su ciudadanía, favoreciendo en cambio a ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes legales, lo cual infringe la Ley de Inmigración y Nacionalidad.
Por su parte, SpaceX calificó el reclamo del Departamento de Justicia de “insostenible desde el punto de vista fáctico y jurídico”. Afirmó que el hecho de que los procedimientos de la agencia estén bajo el control de un juez administrativo es inconstitucional, ya que dichos jueces no son nombrados por el presidente del país y no están bajo la supervisión de un funcionario del Poder Ejecutivo. Subrayó que con esto la compañía se ve privada de su derecho constitucional a un juicio con jurado, como sería el caso en un tribunal federal.
Además, el gigante tecnológico afirma que durante el mencionado periodo publicó casi 11.500 anuncios de empleo y recibió más de un millón de solicitudes. Señaló que para algunos puestos se reciben cientos de solicitudes, lo que “permite a SpaceX ser muy selectivo: sólo alrededor de 1 % de las solicitudes acaban en una contratación”.
La empresa aeroespacial de Musk asegura que algunos de sus proyectos tienen restricciones legales, ya que están relacionados con tecnología militar y de defensa, por lo que deben estar en buenas manos para garantizar la seguridad nacional del país. En ese contexto, subrayó que “en ausencia de restricciones legales o reglamentarias, SpaceX contratará a las personas con más talento de la Tierra, independientemente de su origen”.