Una comunidad de 5 mil habitantes de Francia no sale de su estupor. Una niña de cinco años fue hallada muerta dentro de una bolsa de basura en la localidad de Rambervillers, Vogos.
Los padres, de nacionalidad rumana, habían denunciado la desaparición de su hija a primera hora de la tarde del martes, según detalló el alcalde Jean-Pierre Michel. De acuerdo con la declaración policial, perdieron de vista a la pequeña mientras jugaba en un parque cerca de su domicilio.
Una vez notificadas las autoridades, se abrió una investigación que condujo al hallazgo del cuerpo y también a la detención de un sospechoso. Se trata de un adolescente de entre 15 y 16 años, quien informó a las fuerzas de seguridad haber encontrado el cuerpo de la pequeña en el inmueble donde vive con su madre.
“Los policías municipales intervinieron primero, ellos fueron los que descubrieron el cuerpo, y luego llegaron los servicios de emergencia, intentaron dar un masaje cardíaco, pero no había nada que hacer. Ya era demasiado tarde”, señalaron desde un departamento de Policía local a la agencia.
De acuerdo al reporte divulgado, el cuerpo desnudo yacía en una bolsa de basura dentro de un apartamento a cien metros de la casa de la víctima. La autopsia, que se llevará a cabo en el instituto forense de Nancy, permitirá conocer más sobre las condiciones bajo las que se produjo esta tragedia.
La batería de análisis y muestras será necesaria para saber cómo murió la niña pero también si sufrió violencia sexual. Esta muerte es la primera de este tipo desde el caso Anais Marcelli, una niña de 10 años, cuyo cuerpo fue descubierto en 1991 en el paso de Bussang.
Sospechoso, con trastornos siquiátricos
El acusado era vigilado por las autoridades por hechos relacionados con “abusos sexuales a menores”, según las autoridades. A su vez, según el medio Le Republicain Lorrain, el joven tiene trastornos psiquiátricos y frecuentaba una institución especializada. Fue recluido allí a principios de 2022 y liberado en febrero de este año.
En ese sentido, el procurador del caso, Frédéric Nahon, precisó a través de un comunicado reciente que el joven había sido imputado con anterioridad “por cargos de retención forzosa, violación y agresión sexual a una menor de 15 años”.
Con ese historial, vecinos de la familia rumana se preguntaron por qué el acusado no era vigilado en forma permanente. Según el fiscal del caso, un informe siquiátrico concluyó a principios de 2022 que ya no sufría trastornos mentales de ningún tipo.
Por su parte, el diario regional Vosges Matin remarcó que “era conocido en la zona porque había tenido comportamientos pedófilos” años atrás. Ese medio publicó que había vuelto a la localidad hacía unos días. Residentes de la zona le atribuyeron un “comportamiento inquietante” con los niños del barrio. “A mi hija de once años la amenazó y le dijo que iba a violarla”, señaló uno de ellos ante AFP.
“Estoy destrozada”: el dolor de la madre
“Estoy destrozada”, lamentó la madre de la niña en un contacto con la prensa local. “Es demasiado doloroso. Jamás voy a poder superarlo” dijo entre lágrimas.
“Dicen que hace dos semanas estuvo encerrado en un manicomio. ¿Por qué lo dejaron salir? “, se preguntó. Y añadió: “Quiero que se haga justicia y que no se vuelva a dejar a los enfermos sueltos, porque no destruyen sólo una vida, sino la de toda una familia”.