El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró este viernes que entiende “muy bien la preocupación y la desesperación que tienen familiares por sus desaparecidos y sus víctimas” y dijo que su gobierno es consciente de que “la violencia daña mucho”.
Al participar en la supervisión del Plan de Salud IMSS-Bienestar en Fresnillo, Zacatecas, donde hubo protestas por la inseguridad y las desapariciones, el mandatario dijo que tiene “mucha confianza y fe de que vamos a resolver el problema” en el estado y en el país.
Acompañado por el gobernador David Monreal y el director del IMSS, Zoé Robledo, entre otros funcionarios, López Obrador aseguró que su administración está apoyando al gobierno local a enfrentar “los graves problemas, estamos ayudando a David para que podamos pacificar Zacatecas. No hemos dejado de apoyar con elementos de Marina, del Ejército, de la Guardia Nacional, y vamos a seguir ayudando para enfrentar el flagelo de la violencia”.
El mandatario aseguró que hay avances en materia de seguridad y dijo que la violencia “es un problema que heredamos de gobiernos que no les interesaba garantizar la seguridad y la paz” en los que “los que estaban responsabilizados de atender la seguridad eran parte de la delincuencia organizada”, lo que ejemplificó con el caso de el ex secretario de Seguridad Pública de Felipe Calderón, Genaro García Luna, declarado culpable en Estados Unidos de narcotráfico.
Afirmó que ahora “está bien pintada la raya, una cosa son los delincuentes y otra cosa es la autoridad, ya no hay el contubernio que existía antes”.
Luego de visitar Zacatecas, el mandatario federal y su comitiva arribaron a Soledad de Graciano Sánchez, San Luis Potosí, donde junto con el gobernador José Ricardo Gallardo Cardona evaluó el Plan de Salud IMSS-Bienestar del estado.
El jefe del Ejecutivo confió en que al finalizar su administración “vamos a tener completa toda la plantilla de personal (en el sistema de salud) y de esa manera vamos a ofrecer un servicio de calidad, gratuito, como en Canadá, como en Dinamarca”.
Por la mañana, en la conferencia diaria del presidente López Obrador, Germán Martínez, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dijo que la presa El Realito, con la que se abastece el 15 por ciento de la demanda de agua de la Zona Metropolitana de San Luis Potosí, no representa un riesgo para la población, pues su cortina no presenta daño estructural y es estable, pese a las fugas que presenta por un “deficiente proceso constructivo”.
Informó que iniciarán las labores para la reparación de las fugas, con el sellado de una de sus caras, sin suspender el abastecimiento. En cuanto al acueducto El Realito, de 132 kilómetros, indicó que 90 por ciento de sus fallas se concentran en un tramo de 59 kilómetros, que serán sometidos a revisión técnica para su reparación.