Al cierre del 2022, el saldo de la deuda de las entidades federativas, municipios y sus entes públicos registró un saldo de 644 mil 460 millones de pesos, 4.8% menos en términos reales a lo registrado un año antes. La baja anual es la mayor en 12 años, pese a la carga que impuso el mayor costo financiero por las alzas en las tasas de interés.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la tasa de interés promedio ponderada durante el cuarto trimestre del año fue de 11.02%, casi cinco puntos porcentuales mayor a la de un año antes y 6.17 mayor que en 2019.
La acelerada erosión del presupuesto de las entidades federativas por los crecientes costos financieros y una mayor racionalización del gasto destacan entre los factores que motivaron sus políticas de gasto, lo que las llevó a reducir el monto de los recursos entregados a las instituciones de crédito para orientarlos a proyectos económicos y programas sociales.
En los saldos de la deuda por entidad, la Ciudad de México se mantuvo como líder en los pasivos financieros con 98 mil 938 millones de pesos, que representan el 15.4% del total, aunque fue 2.9% menor en términos reales que un año antes.
En segundo lugar estuvo Nuevo León, con 94 mil 366 millones de pesos, 14.6% del total, y 6.1% mayor que un año antes. Los neoleoneses asumieron un costo por su deuda de 9.77%, y si bien es de las tasas más bajas, presenta el segundo plazo promedio más alto, con 18.9 años, sólo después de Coahuila, con 20.8 años.
La Ciudad de México, Nuevo León y Coahuila representaron casi el 40% de la deuda de los estados al cierre de 2022.
Sin considerar Querétaro y Tlaxcala, que no presentan pasivos financieros, los estados menos endeudados fueron Campeche y Baja California Sur, con 2 mil 283 y mil 717 millones de pesos, respectivamente.
Campeche, luego de alcanzar su mayor endeudamiento en el 2018, ha amortizado año con año sus pasivos, de forma tal que de ese año al cierre de 2022 registra una disminución de 27% en términos reales, mientras que Baja California Sur alcanzó su mayor endeudamiento en 2013, y al concluir 2022, registra una reducción de 34% en términos reales.
Entre 2018 y 2022, Querétaro pagó el total de sus pasivos financieros, mientras que Guerrero lo hizo en 41%, Hidalgo en 38.5% y Sinaloa en 36.5% en términos reales. En contraste, Yucatán los incrementó en 84.5%, Guanajuato en 68.5% y Jalisco en 33.9% en términos reales. La Ciudad de México mantuvo su endeudamiento más o menos constante, logrando una reducción de apenas 0.9% en dicho lapso.
Las tasas de interés que aplican las instituciones financieras a la deuda de los estados está sincronizada con la tasa objetivo o tasa de referencia que aplica el Banco de México en su lucha para abatir la inflación.
Entre 2020 y 2022, la tasa de interés aplicada a los pasivos financieros de los estados aumentó 6.17 puntos porcentuales. En el mismo lapso, el banco central mexicano incrementó su tasa en 6.25 puntos porcentuales.
Si bien las tasas podrían estar alcanzando sus niveles más altos en el primer trimestre de este año, los actuales son elevados y se prevé que el proceso de ajuste a la baja será lento, ello de no suceder algún evento imprevisto que cambie las expectativas de los mercados.